Si hay un baterista que ha dejado su huella en el Thrash Metal, ese es Dave Lombardo. Con su trabajo en SLAYER, redefinió lo que significa tocar con agresividad y precisión, convirtiéndose en una pieza clave del sonido de la banda. Pero como toda historia de grandes leyendas, su relación con el grupo tuvo altibajos, y su salida definitiva en 2013 dejó algunas cicatrices.

En una reciente entrevista para The New York Hardcore Chronicles Live!, el cubano más rápido que un balazo habló sobre su tiempo con la banda y, aunque reconoce que las cosas no terminaron de la mejor manera, no se lamenta demasiado:

Amo lo que hice en SLAYER. En retrospectiva, ha sido increíble. ¿Cómo no hacerlo? ¡Mierdas que pasan! Tienes desacuerdos, las familias discuten, y así es la vida. Estoy feliz de haber sido parte de una banda legendaria y de haber contribuido a este género que me ha apoyado toda mi carrera."

Básicamente, Dave ha pasado la página y sigue pateando traseros con múltiples proyectos, pero su excompañero Kerry King aún guarda algo de rencor. En una entrevista con Rolling Stone el año pasado, el guitarrista recordó cómo Lombardo lo "apuñaló por la espalda" justo cuando él estaba tratando de mantenerlo en la banda:

Habló pestes sobre mí cuando estábamos en un vuelo a Australia y no podíamos responderle por 14 horas. Yo era el único que lo quería en la banda, pero después de eso pensé: '¡A la chucha con este weón!'."

Al final del día, lo que queda claro es que Dave Lombardo no necesita a SLAYER para seguir pateando traseros. Con una carrera impresionante y más proyectos de los que podemos contar con los dedos, el baterista sigue siendo un titán del Metal. Y mientras King aún guarda rencores, Dave simplemente dice: "Mierdas que pasan".