MERIDION es, sin lugar a duda, una de las agrupaciones más importantes dentro del underground criollo. Esto se debe, básicamente, a la interesante propuesta que presentaron en su debut "Rise from the South" (2018) y que, seis años después, nos sumergen nuevamente en su ritual ancestral a través de los himnos que componen "Caverns", editado por Iron, Blood and Death Corporation de México.

Todo gran disco debe comenzar con una carátula que lo glorifique aún más. En esta ocasión, el encargado de esta misión fue Daniel Hermosilla (CENOTAFIO, IGNIFANIA, entre otros), quien logró capturar en su totalidad el concepto de esta producción.

En lo musical, el Metal de Muerte que ejecutan 'SouthernCurse', 'BoneFucker', 'Shoort Dagon' y 'Condanatore', a pesar de mantener las directrices más clásicas del estilo, se atreve a innovar al incluir instrumentos como un cuerno, que, acompañado de sintetizadores y teclados, genera atmósferas realmente inquietantes. Los matices vocales también juegan un papel fundamental en el ambiente que se crea mientras se escucha esta placa. Para que se hagan una idea, la música de MERIDION tiene algo de los australianos PORTAL y de los norteamericanos IMPERIAL TRIUMPHANT.

Siete rituales, más un instrumental, es lo que presentan en este segundo full-length. Dentro de los temas que más nos embrujaron se encuentran "Darkness Unleashed", el cual tiene una estructura musical muy bien lograda, lo mismo que "Calafate", que va ganando en intensidad. También debemos destacar "The Curse of Maquehua", que cuenta con una excelente lírica para quienes son seguidores de la cultura ancestral del sur del mundo. Por último, "Behold Man from Monteverde" es otra de las canciones que se destacan por lo cavernoso de su sonido.

En conclusión, "Caverns" es una tremenda obra desde cualquier perspectiva. Incluso hemos tenido la oportunidad de escuchar estas canciones en vivo, y realmente suenan contundentes y demoledoras. MERIDION se merece la oportunidad de estar presente en algún festival, porque se lo han ganado con creces.

Por Gustavo Maldonado G.