Junio 9/2018, ex-Teatro Mundo Mágico.

Mi último recuerdo de Mundo Mágico, se remonta a la década del ochenta cuando fui con esa ilusión e inocencia muy típica de la niñez; de eso, han pasado casi ya 30 años y mi regreso fue marcado por la gira de los gringos HAVOK, quienes compartirían proscenio junto a SOBERNOT, NSD, METAL COMMAND, MASSIVE POWER y los ecuatorianos DEATHWEISER.

Por temas logísticos, no alcance a presenciar la actuación de SOBERNOT, por lo que pido las disculpas correspondientes. Aunque tengo la certeza de que no faltará la oportunidad de escuchar en vivo a los responsables del epé “Aurt”.

NUNCA SEREMOS DICHOSOS.
Cuando el frío pre-nevada hacía lo suyo, aparecen los NUNCA SEREMOS DICHOSOS. El cuarteto que realiza algo que ellos catalogan como “Metal de Raíz”, derrocharon pachorra y entrega durante los minutos de los cuales disponían. Desgraciadamente, desde la posición en la cual me encontraba en ese momento, no era de las mejores; ya que se escuchaba demasiado saturado, lo cual no me permite dar un vaticinio correcto sobre el desempeño en cuanto a su música se refiere.

METAL COMMAND.
La banda que me sorprendió enormemente por su solidez y manejo del publico fueron los jóvenes de METAL COMMAND, quienes básicamente reafirmaron lo expuesto en su debut, “Legacy”; una propuesta Thrash Metal que cuenta con ciertos tintes más Groove. Me atrevo a decir que si la banda no pierde el rumbo y sigue en la misma senda, serán uno de los grupos importantes de nuestro terruño: Metal directo y sin contemplaciones, serían los adjetivos que mejor grafican lo efectuado por estos broca cochis.

MASSIVE POWER.
Con algo de retraso y cuando mi Citizen marcaba las 20:44, los consolidados MASSIVE POWER destrozaron el lugar. Su Thrash posee ese toque callejero que ha cautivado a muchos desde tiempos remotos.

“¡Esto es Thrash tocado por Thrashers, conchetumare!”... ¡Qué afirmación más certera es la que esbozó Rodrigo Echeverría! Mientras el látigo del Metal azotaba con fuerza a los presentes, la pequeña pista disponible albergaba un pequeño, pero no menos violento Mosh. Maciza presentación de los Maupucinos.

DEATHWEISER.
Lo que pasó con DEATHWEISER es de aquellas bandas que quizás no todos conocemos y que te dejan una grata impresión. ¡Es increíble el poderío que desparraman en el escenario!

Rubén Luzuriaga constantemente invitaba al público a acompañarlo con los “¡Eh! ¡Eh! ¡Eh!” y a desatar un mosh frenético y violento. A pesar de que los minutos con los que contaron no fueron muchos, lograron cumplir con su objetivo y dejaron la puerta abierta para un retorno. Dedito para arriba.

HAVOK.
No recuerdo mucho a que hora se sirvió el plato principal. En esos momentos, unos 200 valientes Thrashers desafiaron la lluvia, el frío y todo tipo de inclemencia para decir presente.

En honor a la verdad, nunca me había interiorizado mucho en lo que ha entregado HAVOK desde su formación en el año 2009 a la fecha, sin embargo y dado a la calidad interpretativa que le lleva violencia por doquier, se ganaron un fan.

¡Qué show se mandaron! Potencia de “Pe a Pa”. La jornada se podría resumir con un ¡LA CAGÓ!, en donde la banda repasó completo su historia en sus cuatro largas producciones, obviamente destacando “Conformicide” (2017) por sobre el resto. El sonido durante la performance de los estadounidenses fue perfecto, hubo un momento en el cual me puse al lado de un parlante y casi quedo sordo, pero definitivamente valió la pena. ¿Punto de inflexión? Sí, "Unnatural Selection"; ¡Temón!.

Quizás la frase a utilizar no sea propiedad de HAVOK, pero creo que viene de perilla “Adrenalin starts to flow, You're thrashing all around”. ¡Gracias, HAVOK, por la lluvia y el Thrash!

Por Gustavo Maldonado G.
Fotos: Max Batlle (Ver galería completa en el siguiente Link.)